El pie plano es un conjunto de trastornos de la alineación del pie, que ocurre cuando estando de pie se apoya el peso sobre la bóveda plantar debido al colapso del arco del pie.
Cuando alguien sufre de pie plano, el talón se desvía hacia afuera, la zona del arco toca el suelo dando una apariencia de hundimiento y la parte más anterior del pie tiene mayor apoyo de la parte interna.
Es bastante común que los niños tengan pie plano, ya que el arco necesita tenido tiempo para desarrollarse por completo, esto es desde el nacimiento hasta los 3-4 años de edad. El arco se desarrolla durante la infancia y la primera niñez como parte de los procesos de crecimiento normales de músculos, tendones, ligamentos y huesos.
Realizar ejercicios como andar de puntillas y andar descalzo en terreno como pasto, puede ayudar a la formación de los arcos durante la niñez, el proceso ocurre generalmente entre los cuatro y seis años de edad.
Es necesario que los padres u algún médico verifiquen el estado de los arcos de los pies de un pequeño. Es necesario realizar una inspección visual, y prestar atención si un niño comienza a caminar en forma extraña, por ejemplo apoyado sobre los cantos exteriores de los pies, o que al correr se caen bastante porque chocan sus rodillas.
El pie plano también puede desarrollarse en adultos a consecuencia de heridas, enfermedades, o esfuerzos prolongados sobre el pie, o como parte de procesos normales de envejecimiento. Si se desarrolla durante la adultez, el pie plano permanecerá plano en forma permanente.
